CHOCOTERAPIA: El sabor de la belleza

Una de las últimas tendencias en tratamientos estéticos incluye al chocolate como alimento-elemento principal.  Esta terapia es tan placentera como rica y fragante, y no pocas personas se están incorporando a esta nueva ola.  En tres preguntas básicas, usted sabrá de que se trata.

¿QUE ES?

La CHOCOTERAPIA es un tipo de tratamiento estético que aprovecha las virtudes energizantes, estimulantes, antiestrés y regenerativas del chocolate.  Es una forma de aprovechar todos los beneficios minerales y propiedades hidratantes de este alimento sin consumirlo en exceso, dado que la absorción de los compuestos del chocolate a través de la piel llegan al torrente sanguíneo y provocan los mismos efectos –salvo el del placer de comerlo, por supuesto– que si se ingiera una barrita.

¿CÓMO SE DESARROLLA?

Existen muchas formas de aplicar el chocolate a través de tratamientos estéticos: masajes, coberturas y mascarillas son los más comunes, pero en algunos centros se han implementado terapias adelgazantes a base de chocolate.

¿QUÉ OPCIONES ESTÉTICAS SE PUEDEN REALIZAR CON CHOCOLATE? 

Existen muchas opciones y cada día se inventan más, pero las más reconocidas son:

• MASCARILLAS EXFOLIANTES: se elabora una mezcla de cacao y azúcar y se aplica, con movimientos circulares y suaves, sobre el rostro.   La finalidad es “barrer” la piel y quitarle las células muertas que la opacan y le quitan oxigenación.  Un tratamiento exfoliante siempre mejora los resultados de cremas, lociones y aceites, porque la piel está más despejada y puede absorber mejor las sustancias que se le aplican. 

• COBERTURAS (CORPORALES): este tratamiento consiste en bañar al cuerpo, cubrirlo, con una ligera capa de chocolate, dejando que éste actúe durante 20 - 30 minutos para absorber sus propiedades beneficiosas.  Si se quiere hidratar la piel, se acompaña con un masaje de mantequilla de cacao.

• MASAJES: existen modalidades, aunque la más difundidas son las que se realizan con una mezcla de cacao, azúcar y aceite de almendras o  aceite de almendras con unas gotas de aceite esencial de chocolate.  Se rocía a la persona con esa preparación para, luego, realizar masajes con el fin de energizar, revitalizar y reducir el estrés.

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